La multa por conducir sin cinturón de seguridad es la sanción administrativa que se impone al ocupante de un vehículo que, estando obligado a utilizar cinturón de seguridad, circula sin llevarlo abrochado.

¿Qué hago si me multan? Hay algunos casos en los que se exime al ocupante de utilizarlo: en maniobras marcha atrás, por razones médicas o en el ejercicio de determinadas profesiones (conductores y ocupantes de vehículos de emergencia, profesores de formación vial, taxistas y repartidores, en vías urbanas). Si estás en uno de estos casos, deberías aportar la documentación que lo demuestre y se te debería retirar la denuncia. Si no fuera el caso, tu única forma de librarte de la sanción sería aportar un escrito negando los hechos y solicitando pruebas que acrediten la comisión de la infracción, aunque si te denunció un agente de la autoridad su simple ratificación de la denuncia se tomará como prueba suficiente, ya que los agentes gozan de presunción de veracidad. A partir de aquí, lo único que te quedaría sería presentar un recurso de reposición y, de no ser aceptado, acudir a juicio por vía administrativa, con los consiguientes gastos en abogados y tasas.