Arrojar residuos como toallitas húmedas, productos de higiene personal, aceites alimentarios o medicamentos por el inodoro o el fregadero es un gesto cada vez más frecuente en los hogares españoles que, sin embargo, tiene graves consecuencias medioambientales y económicas, ya que produce enormes atascos y averías y contamina el entorno.

Con el objetivo de atajar esta problemática, el Ayuntamiento de Toledo y la concesionaria del servicio de aguas y alcantarillado, Tagus, han puesto en marcha diferentes iniciativas para modificar el hábito de tirar residuos al inodoro y concienciar sobre las consecuencias de esta práctica.

La concejala de Servicios Públicos y Sostenibilidad, Eva Jiménez, ha recordado que, “además de un problema medioambiental muy serio acarrea averías muy importantes en la red”, de ahí que sea fundamental que los vecinos y vecinas sean conscientes del problema que acarrea tirar las toallitas al inodoro, “queremos seguir insistiendo e informando de este problema para lograr un cambio de comportamiento”.

Ya el pasado año se puso en marcha la campaña ‘El caos de las toallitas’ con el fin de alertar a la ciudadanía de la necesidad de hacer un buen uso de este tipo de productos, ya que no son biodegradables y, al no desintegrarse en el alcantarillado cuando se vierten al WC, se acumulan y apelmazan hasta obstruir la red.

En ese sentido, el gerente de Tagus, Luis Soto, ha explicado que “aprovechando como coyuntura la celebración del Día Mundial del Medio Ambiente, queremos dar un paso más y concienciar a la ciudadanía de las nefastas consecuencias que puede tener, además de las posibles averías en sus hogares, arrojar determinados residuos por el wc o el fregadero, en lugar de depositarlos en la papelera”.

Productos de higiene personal como los bastoncillos para los oídos, restos de pinturas o disolventes, diversos tipos de medicinas o aceites llegan al sistema de saneamiento de la ciudad y se acumulan en determinados puntos de la red, pudiendo provocar emboces y desbordamientos de agua residual en la vía pública.

Además de incrementar los costes de mantenimiento, esta problemática afecta también al medio ambiente, pues ciertos residuos contienen sustancias que no pueden ser eliminadas en las plantas depuradoras y que, por tanto, acaban en cauces y mares contaminando el entorno.

Compromiso

De este modo, el Ayuntamiento de Toledo junto a Tagus amplían la campaña ‘El caos de las toallitas’, que ya puso en marcha con el objetivo de alertar de los riesgos asociados a la inadecuada eliminación de estos residuos, además de reafirmar su compromiso con la gestión integral del agua y favorecer la concienciación ciudadana para promover una mejor conservación de las canalizaciones y los sistemas de alcantarillado.

La de las toallitas no es la única iniciativa que impulsa Tagus en esta línea. A lo largo del año, la compañía también desarrolla la campaña de educación y sensibilización ambiental como ‘El Curso del Agua’, dirigida a los más pequeños, que también son los protagonistas del concurso de dibujo que se convoca anualmente para reflexionar en torno a diversas problemáticas relacionadas con la gestión del agua y el medio ambiente.

Tanto para el Ayuntamiento como para Tagus es de “enorme importancia seguir impulsando iniciativas de concienciación ambiental”, ha apuntado la concejala de Servicios Públicos y Sostenibilidad, Eva Jiménez, dirigidas a toda la ciudadanía que favorezcan los cambios de comportamiento necesarios para resolver algunos de los principales retos de la sociedad en materia medioambiental, como es conseguir un uso racional de los recursos naturales y promover un mayor cuidado de nuestro entorno para conseguir ciudades más sostenibles”.