No todo el mundo destina la Semana Santa a disfrutar de las tradicionales procesiones que recorren las principales calles de ciudades y pueblos españoles en estas fechas. Cada vez más gente aprovecha estas vacaciones para realizar planes diferentes, sin tintes religiosos, que les permitan desconectar de su rutina habitual y recargar las pilas para afrontar con energías renovadas sus obligaciones cotidianas hasta que llegue su merecido descanso estival. Bajo estas líneas os propongo tres alternativas a las procesiones religiosas que me han parecido muy interesantes. Creo que se trata de tres formas de “desconectar para reconectar”, una práctica que cada vez más coaches recomiendan para alcanzar el éxito tanto en el plano personal como en el profesional.
Sumérgete en una escapada healthy.- Vivimos en un mundo gobernado por las prisas, el estrés y los agobios y, de vez en cuando, necesitamos bajar el ritmo y dedicarnos un poco de tiempo a nosotros mismos. Nada mejor que sumergirse en las aguas termales de un balneario, entregarse a los masajes de unas manos expertas y hacer un “plan détox” durante unos días para volver como nuevo a las duras cargas diarias. España cuenta con una oferta wellness tan amplia como atractiva. Establecimientos como Las Caldas Villa Termal (Asturias), el Balneario Archena (Murcia), el Balneario de Mondariz (Pontevedra) o el Balneario de Burgo de Osma (Soria) son solo algunas de las opciones que encontrarás a lo largo y ancho de la geografía española. Entrar en cualquiera de ellos es sinónimo de entregarse a la paz y el bienestar.
Escápate a la naturaleza.- Otra forma de recargar las pilas es encontrarse cara a cara con la naturaleza y respirar aire puro. En nuestro país existen un sinfín de rutas que merecen la pena ser descubiertas por su incalculable belleza. Échate la mochila al hombro y prepárate para disfrutar de la naturaleza en estado puro. Recomendar una sola ruta de nuestra geografía sería un auténtico pecado, pero hay paraísos naturales que deberíamos ver al menos una vez en la vida, como el Cañón del río Vero (Huesca), la Senda del Oso (Asturias), el Valle de Ordesa (Huesca), el Bosque de Irati (Navarra), la Pedriza (Madrid), la Ruta del Cares (León y Asturias), las Tablas de Daimiel (Ciudad Real), la Ciudad Encantada (Cuenca), Las Hoces del Duratón (Segovia), etc.
Puedes limitarte a hacer una reserva en un hotel rural con encanto y hacer senderismo por la zona para descubrir parajes cargados de encanto o, si el cuerpo te pide descargar más adrenalina, aprovechar para dar un paseo en bici, hacer escalada, piragüismo… ¡Eso ya depende de tu espíritu aventurero!
Pon rumbo a la costa.- Mucha gente de interior está deseando tener un par de días libres para viajar a la costa y encontrarse cara a cara con el mar y cargarse con su energía positiva. Nuestro país dispone de cerca de 6000 kilómetros de costa y, además, las temperaturas suelen ser muy agradables, especialmente a mediados de abril, así que no hace falta irse muy lejos. Mete un par de trajes de baño en la maleta y dirígete a cualquier destino de playa.
Si quieres asegurarte un tiempo soleado, puedes apostar por viajar a cualquiera de las Islas Canarias, pero lo cierto es que en España tenemos tantas playas bonitas que descubrir que resulta complicado elegir… Si te gusta el agua fresquita puedes apostar por cualquier playa cántabra, pero si eres más de bañarte en aguas templadas, la Costa Blanca puede ser buena elección.